viernes, 28 de noviembre de 2008

HISTORIAL CLINICO.TIEMPO DE CUSTODIA


El Juzgado de Primera Instancia nº 3 de Bilbao ha absuelto a un médico de una demanda en la que un paciente le requería la historia completa de su asistencia, treinta años después del alta.La Sentencia se fundamenta el la Ley 41/2002 de 14 de Noviembre, Básica Reguladora de la Autonomía del Paciente y de Derechos y Obligaciones en materia de Información y Documentación Clínica, que, en su artículo 17 establece que “Los centros sanitarios tienen la obligación de conservar la documentación clínica en condiciones que garanticen su correcto mantenimiento y seguridad, aun que no necesariamente en el soporte original, para la debida asistencia al paciente durante el tiempo adecuado a cada caso y, como mínimo, cinco años contados desde la fecha del alta de cada proceso asistencial.”
Sentencia del Juzgado de 1ª Instancia nº 3 de Bilbao de 20 de Octubre de 2008

Leido en Redacción Médica, jueves 27 de noviembre de 2008, nº897, año IV

LA DEPRESION EN EL ANCIANO

Monografía escrita por los Dres Antoni Bernabarre y Marc Valentí, del Servicio de Psiquiatría del Hospital Clínico de Barcelona.
Tras una breve introducción, dedican un primer capítulo a la exploración física y psíquica del anciano. En el siguiente, se “analiza” la depresión en el anciano; revisan las clasificaciones actuales (DSM-IV; CIE-10); hacen una descripción de los síntomas y signos; su etiología, incluyendo aquellos fármacos depresivógenos; de aquellos cuadros clínicos que se asocian a la depresión (arteriosclerosis cerebral, enfermedad de Parkinson,..). También se incluye el diagnóstico y diagnóstico diferencial, con especial atención a la demencia y pseudodemencia.
En los dos últimos temas, repasan brevemente las características farmacológicas del anciano y los diferentes grupos de medicamentos utilizados en el tratamiento de la depresión. También se hace una breve indicación de la terapia electroconvulsiva, útil en el anciano.
Una amplia bibliografía, con citas anteriores al año 2000, finaliza este libro distribuido por los laboratorios Esteve.
No aparece la fecha de la edición.

lunes, 24 de noviembre de 2008

ATENCIÓN MÉDICA EN RESIDENCIAS DE ANCIANOS

1. INTRODUCCIÓN
1.1 De donde venimos: El asilo, la residencia
Las residencias no han sido ajenas, ni lo son, a los cambios sociales ocurridos en las últimas décadas. No hace todavía tanto tiempo que las actuales residencias para ancianos eran conocidas bajo el término de asilo, donde se albergaba a grupos de población dispar, pobres, enfermos, ancianos, que carecían de recursos para vivir en la comunidad. Por diferentes motivos no constituía un hábitat deseado por sus asilados y su ingreso en el asilo marcaba a las personas que en él vivían y originaba el rechazo de la sociedad. Aplicando criterios de beneficencia y caridad, proporcionar cobijo, comida, aseo y ropa eran las principales funciones realizadas por estas instituciones.
Los cambios realizados en los centros, a mediados de los años 70 del siglo pasado, han llevado a estos asilos a convertirse en las actuales residencias, donde se presta una atención de calidad al anciano residente. La residencia sirve de vivienda permanente y común a quienes no pueden satisfacer esta necesidad por otros medios.
1.2. Adonde vamos: El centro socio-sanitario
Factores como el aumento del número de ancianos mayores de 80 años, de las enfermedades crónicas con tendencia a ocasionar invalidez y dependencia según aumenta la edad de las personas, la disminución del potencial de los cuidadores informales debido al descenso del número de hijos y descentralización de la familia, y la escasez de recursos comunitarios para situaciones de gran dependencia y necesidad de atención continuada, aumentan la demanda de plazas y el ingreso de ancianos muy longevos, enfermos y dependientes, que requieren atención desde una perspectiva integral, común entre los servicios sociales y sanitarios, y van transformando el modelo actual de residencia en el complejo concepto de centro socio-sanitario (CSS) donde se ofrecen cuidados y servicios para la dependencia ocasionada por la enfermedad( leer en este blog “EL CENTRO SOCIO SANITARIO, UN RECURSO NECESARIO”

2. NUESTRA RAZÓN DE SER. OBJETIVOS
Objetivo principal:
Proporcionar una atención integral y continua al residente.
Objetivos secundarios:
Organizar una atención multidisciplinar.
Desarrollar y mantener el trabajo en equipo.
Elaboración de programas y protocolos de trabajo.
Coordinación con los servicios sanitarios y socio-sanitarios de nuestra área de referencia.
Participar en la formación del personal.

3. UNA NUEVA FORMA DE TRABAJAR
¿Porqué un cambio en la forma de trabajar si ya prestamos una atención de calidad?. Los siguientes argumentos pueden darnos la respuesta a esta pregunta:
a) La complejidad asistencial de los actuales y futuros residentes requiere de la colaboración de diferentes profesionales que tienen que realizar una actuación coordinada para dar solución a los problemas o necesidades del residente; el trabajo en equipo es necesario.
b) Adquirir bases estructurales elementales que nos permitan una adaptación al próximo desarrollo del Plan Estratégico para el Desarrollo de la Atención Socio – Sanitaria en las diferentes comunidades autónomas.


4. FUNCIONES DEL MÉDICO
Las funciones del médico dentro del equipo de trabajo pueden ser:


4.1. VALORACION INTEGRAL Y CONTINUA DEL ANCIANO
Se realizará una valoración integral de ingreso, durante el primer mes de estancia en la residencia, se registrará si padece enfermedades, la medicación que toma, y si tiene que realizar algún tipo de régimen dietético.En reunión interdisciplinar, de los diferentes miembros del equipo de trabajo se obtendrá información sobre el residente relevante para su salud. Así, se obtendrá la información necesaria referente a su capacidad para el desarrollo de las actividades de la vida diaria, su conducta, hábitos alimenticios o de sueño, etcétera. Del servicio de trabajo social obtendremos información sobre aquellos aspectos de su vida social que puedan afectar a su salud, tales como relaciones familiares, presencia de tutores legales,…, y del personal de enfermería, integrantes del ET, de aquellos aspectos relevantes de su salud, enfermedad o tratamientos.
Con toda esta información recopilada, se propondrá un plan integral de actuación por parte del ET que debe de incluir recomendaciones sanitarias y sociales, tales como actividades de fisioterapia para prevención de caídas o actividades de tiempo libre para evitar el aislamiento y depresión,…
Se programará una valoración integral semestral del residente, cuyo objetivo primordial será prevenir la dependencia o disminuir los efectos de ésta en el caso de que ya existiera cierto grado de dependencia o, en el peor de los casos, mantenerla sin que progrese a mayores grados.


4.2. ATENCIÓN - CONSULTA MÉDICA
Se denomina de este modo la consulta diaria, en la que se atiende a aquellos ancianos que la demandan personalmente o bien a través del personal responsable de su cuidado, o sus familiares y allegados. También serán atendidos aquellos que hayan sido citados para realizar un control de su enfermedad o una determinada prueba diagnóstica (electrocardiograma, realizar un test psicométrico, ..) o terapéutica (extracción de tapones de cera de los oídos, curas de heridas,..).
Dentro de este apartado, y considerado de gran importancia, se incluye el seguimiento del tratamiento farmacológico. Las muchas enfermedades que padecen los residentes determinan el uso de numerosos medicamentos. Llevar un registro de ellos y revisar su indicación periódicamente evita interacciones nocivas no deseadas. La colaboración con el departamento de farmacia(si lo hay), con enfermería y con el personal de la planta responsable de la medicación es indispensable para llevar correctamente los tratamientos.
Indicación y valoración de resultados de fisioterapia, para la recuperación de lesiones agudas o crónicas o preventivas, y la prescripción de dietas alimenticias también se incluyen en esta actividad.


4.3. MEDICINA PREVENTIVA. PREVENCIÓN DE LA SALUD
Leer en este blog ARTÍCULO, “MEDICINA PREVENTIVA EN EL ANCIANO”


4.4. INFORMAR A FAMILIARES Y ALLEGADOS
La tendencia a mantener a los ancianos en sus viviendas, ha ido desarrollando los servicios de ayuda a domicilio, los centros de día, la teleasistencia, y otras actividades que hacen partícipe a la familia en los cuidados de sus ancianos, y esta participación se continua cuando el anciano ingresa en la residencia. Así, los familiares cada vez están más integrados en la atención del anciano residente y solicitan más información sobre su estado de salud, principalmente en las fases finales de la enfermedad. Facilitarles la información correcta por el personal adecuado mejora la percepción de calidad asistencial, evitando, como ocurre a veces, que la familia solicita información sobre su familiar a cualquier empleado del centro y que éste no siempre está bien informado sobre lo que hay que decir.


4.5. RELACIONES CON LOS SERVICIOS SANITARIOS LOCALES
Los traslados a los hospitales o a las consultas de médicos especialistas en los ambulatorios son cada vez más frecuentes debido a las múltiples patologías del residente. También es más habitual la necesidad de acudir a diferentes departamentos de la Administración para autorizar la dispensación de determinadas medicaciones u otros productos de uso sanitario. Mantener buenas relaciones con estos centros y sus profesionales facilitará el desarrollo de nuestra labor. El acudir, de forma programada, algún miembro autorizado del equipo a recibir información sobre los ancianos ingresados en el hospital, la elaboración de informes para llevar a las diferentes consultas y la organización de reuniones con los diferentes departamentos de la administración local, ambulatorios, inspección médica o de farmacia, son actividades a realizar.

4.6. EQUIPO MULTIDISCIPLINAR
En diferentes momentos de este artículo he hecho referencia a la importancia del trabajo en equipo.
Está demostrado que el trabajo en grupo tiene como consecuencia una disminución de la mortalidad y de la aparición de enfermedades; además, reduce la invalidez y la dependencia. También, se ha demostrado su eficacia para disminuir los gastos que ocasiona la atención a estos ancianos.
Promover su creación y participar activamente en sus reuniones es una labor fundamental de la actividad del médico.


4.7. ELABORACIÓN DE PROTOCOLOS
Hoy en día es muy fácil obtener amplia información sobre diferentes temas, sanitarios en nuestro caso, pero esta información no siempre es la más adecuada. Por otra parte, actualmente es muy frecuente la rotación del personal al cual se le debe de instruir en sus quehaceres.
Por estos motivos, debemos de considerar los protocolos de trabajo como una forma de trabajo organizada y consensuada entre los diferentes profesionales que intervienen en el desarrollo de una actividad, dejando poco espacio a la improvisación personal.
El servicio médico y de enfermería debe de promover y participar en la elaboración y difusión de protocolos de trabajo.

4.8. FORMACIÓN CONTINUADA DEL PERSONAL
Las necesidades de las personas mayores, sobre todo de aquellos con limitaciones funcionales que disminuyen su actividad social y su cuidado personal, demandan actitudes que implican la intervención de personal cualificado, con formación específica y conocimientos suficientes para afrontar estas demandas.
El servicio médico de la residencia debe de participar y promover la formación de otros profesionales y empleados del centro para que conozcan y apliquen criterios adecuados en la atención del residente. Mediante cursos básicos o especializados, organizados por la propia residencia o empresas externas, conseguiremos acercarnos a los objetivos marcados por el centro.

4.9. EDUCACIÓN DEL RESIDENTE, FAMILIARES Y VOLUNTARIOS
Por medio del equipo de trabajo debemos de informar a estos grupos de cuáles son nuestros objetivos y nuestros métodos de trabajo; así mejoraremos las relaciones entre nosotros. El personal sanitario informará sobre las medidas de higiene, la importancia de la alimentación y de seguir los diferentes regimenes necesarios evitando, por ejemplo, que los familiares o voluntarios traigan dulces a aquellos que son diabéticos; también se darán consejos sobre la actitud a tomar con las personas que presenten desorientación o delirios. Esta labor cobra máxima importancia en aquellos ancianos que están en situación de enfermedad grave, en las denominadas fases terminales.

4.10. FAVORECER LA INVESTIGACION
Porque la investigación en una vía que mejora la calidad, debemos promover la actuación de los diferentes profesionales que trabajan en la residencia en cuantos actos científicos sean de interés, procurando divulgar quiénes somos y qué hacemos.

5. MODELO DE ORGANIZACIÓN SEMANAL DEL TRABAJO
Una buena organización de la consulta implica una mayor calidad en la atención de los residentes.


La revisión de la agenda de trabajo, al inicio del día, no será superior a 30 minutos, e incluirá conocer las incidencias habidas desde la jornada anterior, recepción de pruebas complementarias solicitadas (análisis, radiografías…) y organización de la jornada.

La consulta médica a demanda, con una duración aproximada de tres horas, se realizará al menos 4 días a la semana. Utilizar un sistema eficaz de cita previa, será un objetivo de este servicio para evitar esperas innecesarias de los residentes y personal acompañante.

La consulta programada se realizará tres o cuatro días a la semana y su duración estimada será de dos horas pordía. En ella se incluirán las revisiones preingreso, post ingreso, semestrales y aquellas para el control de enfermedades crónicas que así lo requieran.

Dentro del tiempo dedicado a las actividades complementarias se incluyen las reuniones con el equipo de trabajo, la realización de informes, revisión de tratamientos, y todas aquellas actividades incluidas en las funciones a desarrollar por el médico que no tienen cabida en los apartados anteriores.

LUNES/MARTES/MIÉRCOLES/JUEVES/VIERNES
______________________________________
------- REVISIÓN DE AGENDA DE TRABAJO------

---------CONSULTA MÉDICA A DEMANDA--------

--------CONSULTA MÉDICA PROGRAMADA------


--------ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS------

domingo, 23 de noviembre de 2008

ARTROSIS


Osteoarthritis

Es la atropatía degenerativa más frecuente. Clinicamente se caracteriza por dolor articular, rigidez, limitación funcional y grados variables de derrame articular e inflamación local con deformidades.La etiopatogenia es múltiple así como los factores de riesgo para su desarrollo. Determinadas actividades laborales han sido relacionadas con la evolución de esta enfermedad.


Se presentan las manos de una mujer, de 95 años, que ha trabajado de carnicera.

jueves, 20 de noviembre de 2008

GASTO FARMACÉUTICO EN RESIDENCIAS DE ANCIANOS,AÑO 2007

La Dirección Territorial de Bizkaia del Departamento de Sanidad de Gobierno Vasco, periódicamente nos envia información referente a la prescripción en la residencia de ancianos. De los diferentes comunicados recibidos durante el pasado año, obtenemos los datos que se exponen a continuación.

El gasto en medicación de dos residencias, con capacidad actual para 365 ancianos/as, durante el año 2007, ha sido el siguiente:

--Importe total: 554.503 euros

--Nº de recetas /envases, prescritas: 43.534
---Precio,coste,medio por receta/envase: 12,7 euros

La publicación Información Terapéutica del Sistema Nacional de Salud, en el volumen 32, nº 3/2008, en las páginas 98-100, nos informa del gasto en medicamentos en España, facturados a través de las oficinas de farmacia, excluidos los medicamentos de uso en hospitales, durante el año 2007, que resumido, serían los siguientes:

--Importe total (PVP):12.377,05 millones de euros
---Importe pensionistas:8.994,54 millones de euros

--Nº recetas prescritas,total:843,37 millones
----- de pensionistas:590,06 millones

--Precio medio receta :14,68 euros
----de activo : 13,53 euros
----de pensionista : 15,24 euros
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domingo, 2 de noviembre de 2008

MEDICINA PREVENTIVA EN EL ANCIANO

Nos podemos preguntar sí en este grupo de edad es posible prevenir la enfermedad, y la respuesta debe de ser que sí.

En estas edades, donde la enfermedad ocasiona mucha incapacidad y dependencia, es muy importante realizar programas de prevención de enfermedades e incluso se obtienen, en muchas de estas actuaciones, mejores resultados que en personas más jóvenes (el control de la tensión arterial ha sido más eficaz para disminuir la incidencia de ictus en ancianos que en gente más joven). La eficacia de la prevención en los ancianos no debe de medirse en términos de alargar la vida, sino de evitar la dependencia.

Entre las muchas medidas de prevención que se deben de tomar, destacamos:

--Vacunación antigripal, antineumocócica y antitetánica.

--Control de factores de riesgo para la enfermedad cardiovascular: presión arterial, colesterol, tabaco, alcohol…

--Promoción de hábitos de higiene, de ejercicio físico y de integración social.

--Prevención de desordenes nutricionales. La obesidad, las anemias, las deficiencias de calcio o de proteínas son las más importantes.

--Detección y corrección de factores que predispongan al desarrollo de los diversos síndromes geriátricos: caídas, visión, audición, movilidad, úlceras por presión.

--Prevenir la automedicación, informando sobre los efectos perjudiciales y riesgos que ello conlleva y realizando una adecuada prescripción medica, evitando, por ejemplo, que el anciano tenga que automedicarse con un analgésico entre horas porque el que se le prescribió no le mejora el dolor en el tiempo previsto entre dos dosis.

--Prevenir la aparición o propagación de enfermedades infecciosas contagiosas, como tuberculosis, SIDA, infecciones por estafilococo aereus meticilin resistente que coloniza o infecta las heridas o úlceras de la piel,…

--Búsqueda y detección precoz de tumores malignos de alta incidencia en estas edades, principalmente de pulmón, mama, colon, ovario, útero, y próstata.

--Prevención del abuso y maltrato al anciano, bien por daño físico o psíquico como consecuencia de un acto u omisión por parte de aquellos que deben de cuidarle.

sábado, 1 de noviembre de 2008

REHABILITACION DE LOS SINDROMES GERIATRICOS: DETERIORO COGNITIVO

Las funciones cogntivas son aquellas que procesan, almacenan y recuperan, la información que recibimos a través de los órganos de los sentidos, información de uno mismo y del mundo que nos rodea.
Como deterioro cognitivo se conoce el declinar de estas funciones, que pueden variar desde leves trastornos con escasa repercusión para el individuo, hasta graves deterioros que interfieren de forma importante en la capacidad de relacionarse.
Son funciones cognitivas básicas la memoria, la atención y concentración, y la orientación en el tiempo y en el espacio. La percepción, el lenguaje, la habilidad para realizar actividades motoras (praxias), y la capacidad de juicio son consideradas funciones cognitivas superiores.
La difícil distinción entre envejecimiento fisiológico de las funciones cognitivas y el deterioro cognitivo como enfermedad, la amplia extensión del término deterioro cognitivo desde cambios mínimos hasta los graves cambios que ocurren en la demencia, la gran variedad de pruebas y test que se usan para detectar estos cambios, hacen que no se pueda precisar cual es la frecuencia real de este síndrome en las personas mayores. Las cifras varían entre el 20 y el 50% de los mayores de 65 años con deterioro cognitivo leve, y entre el 6 y el 10% para demencia, aumentando en ambos casos al aumentar la edad de los ancianos.
Aunque las causas de este proceso no se conocen, se consideran que factores genéticos, anomalías en diferentes cromosomas, asociados a otros factores internos o externos estarían relacionados en las diferentes etiologías.
Pueden considerarse como factores de riesgo para el desarrollo de este síndrome:
-Enfermedades neurológicas: ictus, traumatismos craneales, hidrocefalia, y otras que deterioran las neuronas.
-Enfermedades cardio - respiratorias: bronquitis crónica, cardiopatía isquémica, y otras que producen una disminución del aporte de oxígeno al cerebro.
-Enfermedades metabólicas: diabetes, hipo e hipertiroidismo, uremia, que producen sustancias tóxicas para sistema nervioso.
-Trastornos psiquiátricos: principalmente la depresión.
-Medicamentos: las benzodiacepinas disminuyen la memoria.
-Tóxicos: el alcohol es el más importante, por su frecuencia, en este grupo de edad,
Todas estas circunstancias desencadenan una serie de procesos fisiopatológicos, que de forma brusca, aguda o bien paulatinamente, progresiva, reversibles o irreversibles, originan un déficit de estas funciones, así:
La memoria, en sus diferentes tipos, corto, medio y largo plazo, semántica o episódica, verbal o espacial, es la función inicialmente más frecuentemente afectada. El individuo no recuerda donde ha dejado determinados objetos o el nombre de algún amigo o familiar. En las situaciones más graves, no recuerda su propia biografía, nombre, lugar de nacimiento, etcétera.
La atención y concentración, básicas para captar los estímulos que recibe o para el desarrollo de otras funciones, también se encuentran alteradas, observando sujetos que se distraen con facilidad y tienen dificultades para inhibir respuestas inadecuadas.
La desorientación, inicialmente en el tiempo y posteriormente en el espacio, es muy frecuente observarla en estos ancianos, los individuos no reconocen la hora ni el día en el que viven y posteriormente no reconocen los lugares donde se encuentran. Es frecuente que aparezca un caminar errático sin un objetivo determinado.
Las alteraciones en la percepción, los trastornos del lenguaje, que pueden variar desde leves dificultades para nombrar objetos hasta la ausencia total, las apraxias, deterioros de las capacidades para desarrollar actos motores con integridad del aparato locomotor, y el deterioro en la capacidad para planificar y organizar actividades, son otras funciones que se encuentran alteradas en menor o mayor intensidad cuanto más evolucionado esté el deterioro cognitivo.
Aún desconociendo las causas de este deterioro, en el tratamiento de estos déficit, se deben aplicar programas de rehabilitación preventivos en aquellos ancianos con factores de riesgo. Serán actividades de movilización precoz, realización de ejercicio físico, de rehabilitación cardio respiratoria y otras ya mencionadas.
Cuando el deterioro se ha instaurado, a las actividades rehabilitadoras básicas, se añadirán técnicas para mejorar las funciones cognitivas. Así, desarrollaremos programas de entrenamiento de memoria estimulando la capacidad para recibir información, presentando fotografías de personas conocidas y familiares, lectura y recuerdo posterior de textos, organización de palabras en grupos, animales, alimentos, o bien recordar acontecimientos autobiográficos.
Las técnicas de orientación a la realidad, explicando al anciano el día y lugar donde se encuentra, lo que se va ha hacer, "vamos a comer", han demostrado eficacia en los trastornos de orientación..
Acciones para desarrollar el lenguaje, mediante el renombre de objetos y personas, la realización de las actividades cotidianas, y el desarrollo de ténicas que mejoren la capacidad de juicio mediante refranes, clasificación de objetos, juegos y otras, han demostrado su utilidad para enlentecer el deterioro de estas funciones.
Para la aplicación de estos y otros programas, si imprescindible es el equipo multidisciplinar, también lo es la familia, a la cual debemos de asesorar sobre la necesidad de la aplicación de estas actividades y su continuidad en el domicilio, o residencia, del anciano. Se recomendará mantener un horario para la realización de las actividades tanto habituales como lúdicas, que se le ayude en aquellas tareas que el anciano no pueda realizar, que se le recuerde el día y lugar donde se encuentra y su relación con el interlocutor, que se le facilite la realización de ejercicio, paseo fundamentalmente, y otras actividades que el anciano pueda desarrollar.
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