domingo, 13 de noviembre de 2011

DIABETES MELLITUS. ASPECTOS PARA ATENCIÓN PRIMARIA DE SALUD

Celebran los autores con esta monografía los veinte años que llevan realizando un curso -taller educacional sobre diabetes. Hay que felicitarles por ello.

En trescientas treinta y seis páginas, describen de forma muy práctica y con alto contenido científico, dedicando cada uno de los18 capítulos a la importancia de la educación diabetológica, el laboratorio en la diabetes, educación nutricional en la diabetes, el ejercicio, auto -análisis y autocontrol, antidiabéticos orales, insulinas, pánico a la insulina-la puesta en escena del terapeuta es llamativa, teatral, según sus propias palabras-, hipoglucemia, hipoglucemia en versión B (definido por el coordinador como tratamiento a pie del cañón), hiperglucemia, diabetes infantil, la salud buco dental del paciente diabético –los edéntulos también pueden padecer alteraciones bucales-, nefropatía diabética, pie diabético, diabetes y embarazo, diabetes gestacional en versión B, e incretinas en el tratamiento de la DM.

Coordinados por José A. Chena, Unidad de Endocrinología y Nutrición del Hospital General San Jorge, Huesca, España, participan en su elaboración diferentes profesionales, titulados en enfermería, endocrinólogos, médicos de familia, pediatras, nefrólogos, cirujanos cardiovasculares, bioqímicos y nutricionistas, aportando el carácter multidisciplinar que requiere esta patología. La bibliografía actualizada, aunque no referenciada en el texto, es otro aspecto destacable.

El laboratorio farmacéutico Novo Nordisk, quien me ha facilitado esta obra, es el patrocinador.

En resumen, es una monografía fácil de leer, y de releer, que aunque tiene temas que poco o nada tiene que ver con nuestra especialidad- diabetes en el niño o en la embarazada-, el resto de los capítulos nos serán muy útiles para nuestra práctica diaria con los ancianos, colectivo donde la incidencia y prevalencia de diabetes es muy elevada. Así, en la revisión que he realizado en dos residencias de ancianos, una con 153 residentes y la otra con 220, con edades medias de 82.3 y 82.9 años, la prevalencia de diabetes es del 21.3% y del 19.8% respectivamente.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Me parece que un aspecto relevante de la diabetes en personas mayoes se pone de manifiesto cuando la persona anciana vive en una residencia geriátrica y es diabética. Como en muchos casos la persona sufre deterioro cognitivo resulta muy difícil saber lo que quiere por lo que, sencillamente se le impone una dieta. Cuando la persona sí sabe lo que quiere, en muchos casos no desea seguir la dieta. ¿Es correcto presionarla o sencillamente imponérsela? ¿No debería ser algo distintivo para elegir una residencia geriátrica saber qué política de alimentación siguen si es que el residente es diabético?